En la foto: TT, Sheyla(y los gemelos),OV, Carolina y Susú, y yo (detrás de la cámara).
Por cierto, – espero que ellas no se enteren – según mi análisis de los regalos, éste es mi conclusión hasta el momento.

En la foto: TT, Sheyla(y los gemelos),OV, Carolina y Susú, y yo (detrás de la cámara).
Por cierto, – espero que ellas no se enteren – según mi análisis de los regalos, éste es mi conclusión hasta el momento.
Era sábado. Y, aunque llovía afuera, hacía mucho calor. Aun seguía esperando noticias, y mientras, me enteré que el señor que vende las tarjetas de llamadas y que usa sombrero de vaquero se llama Santos y además es diabético. Escuché el ruido de la ambulancia y me hizo recordar cuando trajimos a la abuela; nunca olvidaré la cara de mi padre cuando decía, completamente convencido y confiado en la ciencia - y quien sabe si en Dios - que ella se pondría bien.
Cuando esperaba por su café en las mañanas era costumbre que me aconsejase. En el tema del amor, ella alguna vez dijo:” Jamás te fijes en un chico que hayas visto en el pasillo de los pañales desechables del Supermercado”. Ahora ya no hay más ansiedad. Ahora solo espero el momento en que nos reunamos para contarnos a chistes lo que ha sido tan desesperante espera.
Mientras dormías, bella, sonriente, tranquila.
Suspiraste, te miré.
Si supieras, me estoy enamorando.
Tu delicado cabello, sobre tu blanca piel;
quiero acariciar.
Te mueves, te miro, me sonrojo.
Delicado pétalo de flor.
Tus labios con mis labios quisiera rozar.
Y tu aliento almizclado poder aspirar
Delicado botón de rosa.
Muero por decirte al oído,
que eres la más hermosa.
Que me enamorabas.
Mientras dormías.